La Real Academia de la Historia posee una espléndida Biblioteca-Archivo con códices, incunables, manuscritos e impresos de inestimable valor científico, bibliográfico y documental que abarcan desde la alta Edad Media hasta nuestros días, indispensables para el estudio e investigación de la historia de España y de la América hispánica.

La Academia ha tenido siempre como razón de ser velar por la conservación de las antigüedades hispanas y mejorar el conocimiento de todos los aspectos de la historia de España mediante una investigación crítica y analítica, como correspondía ya al momento de su fundación en el Siglo de las Luces. La formación de las colecciones bibliográficas y documentales de la Academia ocurre como consecuencia de estos principios, gracias a sus continuas iniciativas institucionales a lo largo de casi tres siglos, al resultado de los trabajos y legados personales de los académicos, y a las donaciones que ha recibido de instituciones públicas y de particulares, en un proceso de recepción y ampliación de fondos documentales y bibliográficos que permanece abierto.

Destacan, entre las riquezas de su Biblioteca, sus códices e incunables, los miles de libros raros y antiguos anteriores al siglo XX, las magnas colecciones documentales formadas por los académicos desde mediados del siglo XVIII a comienzos del XIX, la del gran genealogista don Luis de Salazar y Castro, las relativas a la América española como la colección Muñoz o la del conde de Cartagena, las procedentes de la Compañía de Jesús, los manuscritos y libros en árabe y lenguas orientales del fondo Gayangos, los archivos de políticos de los siglos XIX y XX y la gran colección de cartografía y artes gráficas.